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He decidido incluir una antigua publicación mía en un nuevo blog, aprovechando mi cuenta en Blogger, para tenerlo todo recogido y ordenado, y no como en el fotolog, que andaba todo desperdigado. Tengo intención de retomar mi modesto ensayo sobre fiestas, borracheras, y alcoholismos varios, dentro de poco. Lo retomaré donde lo dejé, en la etapa 'desfase'. Por si os lo preguntáis, sí, este verano ha habido unos cuántos para tomar de referencia.
Aquí dejo el enlace: Ensayo sobre el Arte de Salir de Fiesta

miércoles, 30 de julio de 2008

Hablemos de fiesta, verano y alcoholismos varios

Para empezar esta tempranera actualización de mi blog (tempranera por el poco tiempo transcurrido desde la última y por las horas en las que la publico), hablaré de mis recuerdos de una de las mayores fiestas veraniegas celebradas en Uribe Kosta: paellas. Mis recuerdos son los siguientes:

Yo, sentado en una silla plegable con una botella (tras otra) de litro de cerveza en la mano.

Sé que ocurrieron más cosas, me lo han contado, pero no puedo hablar de ellas porque sería información de segunda mano. Y en mi blog no admito la información de segunda mano. Pasemos pues a los datos de primera mano: observados por mi persona en tiempo presente, es decir, ahora mismo en la terraza de mi casa. Cinco borrachos habituales, entre los que, cómo no, me cuento, estamos discutiendo sobre banales situaciones relacionadas con sexo, drogas y rock 'n roll. Gilipolleces, dicho más en cristiano. Pero gilipolleces nuestras, que al fin y al cabo, son las que hacen el día a día. Para proteger el anonimato de los aludidos no diré nombres, sino que recurriré a apelativos estilo reservoir dogs, salvo que en lugar de colores utilizaré bebidas.

Se habla del señor pitilingorri, no presente y alcohólico fiestero sin dos dedos de frente donde los haya (y lo digo con todo el cariño). Dice que va a echarse novia formal y dejar el alcohol. No es necesario transcribir onomatopéyicamente la carcajada general. El señor vodka, con novia desde hace bien poco, discute con el señor batidosdeproteínas sobre la fidelidad de ésta hacia su persona, retándole en cierto modo a un intento de seducción a la citada mujer. El señor kalimotxo se dedica a beber tranquilamente su menú de la noche, escuchando con interés las diferentes conversaciones y echando algún esporádico vistazo a mi redacción. El señor garimba, tras pasarse 20 minutos sentado en el suelo (no por mi culpa, hay sillas) hablando con un amigo, se dedica ahora a aportar su punto de vista a las conversaciones de manera jocosa y dicharachera. Yo, por mi parte, con el apelativo de señor brugal (aunque pensándolo bien, para qué me pongo apelativo) me dedico a escribir estas infames líneas (no tanto por mala fama como por falta de ésta) sin descuidar el imprescindible cubatita de ron (el tercero, aún queda tiempo) que se vacía progresivamente pero sin prisa, trago a trago, línea a línea.

Qué grandes previas* ha albergado mi terracita en tiempos de rodríguez. Colegas, alcohol, conversaciones surrealistas, bebidas, risas, litros... ¿me repito? Es lo que hay, pero mola.

* previa: fase de la noche de fiesta consistente en la etapa de alcoholización anterior a la denominada fase fiesta. Para más información, buscar en mi fotolog:
http://www.fotolog.com/elzok/18474113 y siguientes

Para terminar mi escueta pero existente actualización (dicho de otra forma, mejor poco que nada), dedicaré unas líneas a la enorme exhibición del madrileño afincado en Ávila en el recientemente terminado Tour de Francia.

En una prueba de transición, con la ausencia de su último ganador y principal referente mundial en el mundo del ciclismo tras su reafirmación al ganar heroícamente el Giro de Italia (para muchos la prueba más dura del calendario), Carlos Sastre fue el único que mostró la ambición necesaria para hacerse con la carrera (junto al desafortunado Menchov) en la etapa reina, con un ataque desde lejos como los grandes, demostrando ser el mejor escalador de los presentes en esta edición. Posteriormente le dejó al chuparruedas oficial del Tour Cadel Evans con el caramelo en la boca, sacándose de las piernas una espectacular contrarreloj en la que contra todo pronóstico sólo perdió 29 segundos con el australiano. Carlitos 'funicular' Sastre (en honor a sus cualidades de escalada) lució como es costumbre el preciado maillot en la vigesimoprimera etapa para cubrirse de gloria y ser nombrado posteriormente en París mejor corredor del Tour de Francia 2008. Desde aquí (como desde muchos sitios y merecidamente), felicidades.

PD: Yo sigo con mi cubata, hasta otra.


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