¡Precaución! Auto-publicidad

He decidido incluir una antigua publicación mía en un nuevo blog, aprovechando mi cuenta en Blogger, para tenerlo todo recogido y ordenado, y no como en el fotolog, que andaba todo desperdigado. Tengo intención de retomar mi modesto ensayo sobre fiestas, borracheras, y alcoholismos varios, dentro de poco. Lo retomaré donde lo dejé, en la etapa 'desfase'. Por si os lo preguntáis, sí, este verano ha habido unos cuántos para tomar de referencia.
Aquí dejo el enlace: Ensayo sobre el Arte de Salir de Fiesta

lunes, 13 de octubre de 2008

Sonrisas (homenaje póstumo a mi tío)

¿Qué significa sonreir? Es difícil determinarlo pues, como las lágrimas (a las que a veces acompañan), las sonrisas pueden ser de distintas naturalezas. Así, las hay felices, divertidas, enamoradas, nostálgicas... Pueden ser símbolo de toda una infinidad de estados de ánimo, pero si se le tuviera que asignar a este simpático gesto un solo significado, yo me inclinaría por uno muy concreto, que considero denominador común de todos los demás: el triunfo.


No un triunfo tan tangible como el de una victoria del Athletic, sino algo más personal, más etéreo. No en todos los casos alude a victorias puntuales, como una discusión ganada o un negocio ventajoso. Las sonrisas más sinceras son aquellas que regresan a nuestros rostros siempre que las recordamos, aquellas que no sólo sentimos en nuestros labios, sino en un lugar más profundo de nuestro ser, aquellas que nos reconfortan y nos hacen sentir como en casa.


Y aquellas eran las que mi tío siempre proporcionaba. En cualquier contexto siempre mostraba su mejor cara, una cara de triunfo ante la vida, ante los problemas y ante el mal tiempo. Y eso es algo que se contagia. Porque plantar cara con una sonrisa a los palos que nos da la vida es ya una victoria. Y eso es algo que mi tío Jos sabía hacer, y que yo tomaré por dogma, aunque sea difícil en estos momentos por las circunstancias que todos conocemos. Todos sabemos que él no habría querido vernos tristes, desalentados y cabizbajos como estamos, aunque difícil es la tarea de mirar hacia delante. Sin embargo, por mi, por mi familia, y por Jos, en homenaje a su imperturbable optimismo, haré el esfuerzo de sonreir, porque sé que con la ayuda de su recuerdo, dicho esfuerzo no será tal. El triunfo se reflejará por sí sólo en mis labios, aunque una lluvia de lágrimas no pueda evitar asistir al encuentro, aunque sepa que las imágenes que vengan a mi memoria nunca se volverán a repetir, aunque sea consciente de que los recuerdos son sólo eso, recuerdos. Sabré que mi tío, nuestro Jos, siempre estará en nuestras sonrisas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

D.E.P.